Categorías
Sin categoría

Todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad

« Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder…
vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid… »

► 2 Pedro 1:3 a y 5 a

El apóstol Pedro aprendió y revelo una gran bendición para su propia vida y para la del creyente; hemos recibido como regalo “todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad”.

Gracias al poder y amor de Dios, estamos capacitados para vivir en rectitud ya que hemos recibido:

– Preciosas y grandísimas promesas.
– Ser participantes de la naturaleza divina.
– Ayuda para huir de la corrupción que hay en el mundo.

También aprendió el apóstol Pedro, y nos lo enseñó, que hay otras cosas en las cuales debemos “poner toda diligencia por esto mismo, añadid…”,es decir que depende de nuestra actitud y voluntad como parte del proceso.

La cuales diligentemente debemos hacer en agradecimiento a tan maravillosos regalos y por lo tanto tenemos que añadir, sumar, completar y ampliar esas preciosas y grandísimas promesas para que cada día sean más manifiestas en nuestro carácter y brillen como luz delante de los hombres
(Mateo 5,16), algunas de ellas son:

• Darle el primer lugar a Dios en toda mi vida, es esta la clave ,para llamarle Señor y hacer todo lo que Él nos dice. Nada puede ocupar ese lugar que solo a Él le pertenece.
• Buscarle para conocerle verdaderamente, la oración es el elemento que se nos ha entregado para que busquemos Su presencia, y revelándose allí podamos conocerle tal cual es.
• Aprender a confiar en Él, aplicando diariamente Su Palabra en mi vida, ya que cada porción de la Escritura es para nuestra enseñanza y desarrollo, y es a través del uso de ella que nos encontramos realmente con “esas preciosas y grandísimas promesas” que nos ayudan a aprender a confiar, ya que Sus Palabras se cumplirán en nuestras vidas.
• Testificando a otros de lo que ha hecho en mi vida a través de mi actuar y también verbalmente. ¿Cómo podremos callar el regalo maravilloso que viene a la vida de Sus hijos con “preciosas y grandísimas promesas” que tarde o temprano veremos cumplidas? ¿Cómo hablaremos para motivar a muchos a añadir con diligencia lo que sea necesario para crecer…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *