«Y los capataces de los hijos de Israel vinieron a Faraón y se quejaron a él, diciendo: ¿Por qué lo haces así con tus siervos?
No se da paja a tus siervos, y con todo nos dicen: Haced el ladrillo. Y he aquí tus siervos son azotados, y el pueblo tuyo es el culpable. Y él respondió: Estáis ociosos, sí, ociosos, y por eso decís: Vamos y ofrezcamos sacrificios a Jehová.»
► Éxodo 5:15-17
Vivimos una época en donde a las personas se les exige más horas laborales, y más responsabilidades en el trabajo, por el mismo salario de trabajo. Esto puede producir frustración y desespero en el pueblo de Dios, al igual que lo fue en la época de faraón, en que el pueblo de Israel fue sometido bajo el yugo egipcio:
«Id pues, ahora, y trabajad. No se os dará paja, y habéis de entregar la misma tarea de ladrillo. Entonces los capataces de los hijos de Israel se vieron en aflicción, al decírseles: No se disminuirá nada de vuestro ladrillo, de la tarea de cada día.» – Éxodo 5:18-19
Si estás en aflicción por tu dura tarea y carga laboral. Ten en cuenta estas recomendaciones:
No te enojes contra Dios, o contra quienes te instruyen en Su camino: «Y encontrando a Moisés y a Aarón, que estaban a la vista de ellos cuando salían de la presencia de Faraón, les dijeron: Mire Jehová sobre vosotros, y juzgue; pues nos habéis hecho abominables delante de Faraón y de sus siervos, poniéndoles la espada en la mano para que nos maten.» – Éxodo 5:20-21
Clama a Dios, por una pronta respuesta y liberación: «Entonces Moisés se volvió a Jehová, y dijo: Señor, ¿por qué afliges a este pueblo? ¿Para qué me enviaste? Porque desde que yo vine a Faraón para hablarle en tu nombre, ha afligido a este pueblo; y tú no has librado a tu pueblo.» – Éxodo 5:22-23
Punto de acción
«Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces.» – Jeremías 33:3
Lectura bíblica necesaria: Éxodo 5:1-21